Estos ejemplos de desayunos saludables constituyen el estímulo que el metabolismo requiere para obtener energía y los nutrientes necesarios. Al despertar, se convierten en la primera comida, por lo que es primordial que el cuerpo lo reciba.
Con relación a culminar el ayuno nocturno, se trata de prevenir la ralentización del organismo. Por ende, una persona que no desayuna no realiza sus tareas diarias en forma óptima.
Después de un largo periodo de ayuno, el cuerpo posee la suficiente sabiduría para incrementar su eficiencia energética, optimizando el gasto al disminuir las calorías diarias requeridas.
Varias horas de ayuno causan la caída de los niveles de azúcar en la sangre, pero afortunadamente existen ejemplos de desayunos saludables que contrarrestan esta situación.
Deliciosos ejemplos de desayunos saludables para todos los paladares
1. Avena cocida con frutas
Tanto la avena como la fruta son 2 de los mejores “amigos” para agilizar el metabolismo, a la par de brindarle energía al cuerpo y conservarnos saludables.
Asimismo, los desayunos donde están presentes ambos ingredientes son muy fáciles de preparar. No conviene utilizar avena instantánea, porque en diversas ocasiones contiene azúcares y pocos nutrientes.
2. Batido de frutas y avena
Los batidos han ganado un sitial de honor en los ejemplos de desayunos saludables y nutritivos, porque involucra la mezcla de frutas con otros ingredientes de alto contenido nutricional.
Siendo así, esta receta lleva consigo una porción de frutas en combinación con media taza de hojuelas de avena y una taza de bebida vegetal o leche descremada.
En este caso, no es recomendado el uso de edulcorante artificial sino de miel. Muchas personas prescinden de ambos ingredientes, porque la banana brinda suficiente sabor dulce al batido.
3. Burrito de champiñones y huevo
Por su parte, este platillo encaja dentro de los ejemplos de desayunos saludables para adultos, sobre todo para quienes aman los desayunos salados.
Solamente lleva una cucharada de aceite de oliva o de semilla de uva, champiñones picados y un huevo, por último una tortilla integral.
4. Omelette: la tortilla de huevo con vegetales
El omelette o tortilla con vegetales es el mejor desayuno para disfrutar todos los beneficios de las verduras, porque sus ingredientes principales son la cebolla, espinaca, pimientos rojos y verdes.
De igual forma, tiene otros ingredientes nutritivos como el aceite de oliva y el huevo, en conjunto con rellenos como los frijoles o pequeños trozos de aguacate.
5. Pancakes
Por su lado, los pancakes (también conocidos como hot cakes o panquecas) son parte de los ejemplos de desayunos saludables para adolescentes más populares.
Lleva ingredientes como avena en polvo, banano majado, huevo y leche baja en grasa, y sus acompañantes más comunes son las frutas o un batido natural de cualquiera de ellas.
6. Pan integral de yogur
Esta opción predomina en los principales ejemplos de desayunos saludables para bajar de peso, porque tanto la harina de trigo integral como el yogur son alimentos aconsejados para este propósito.
Del mismo modo, contiene hierbas saludables como el orégano o romero, y otros ingredientes beneficios para nuestra salud como el aceite de oliva.
7. Sándwich
Muchas personas comen sándwich en los restaurantes, tal vez desconociendo que el sándwich casero es más beneficioso para su desayuno.
Esto se debe a que los ingredientes utilizados en casa son más sanos y nutritivos, como el aceite de oliva, pan integral, tomate y queso bajo en grasa.
¿Existe el desayuno ideal?
A saber, no existe un desayuno ideal, sino que hay muchísimas opciones distintas. Si el cometido es desayunar saludablemente, este trabajo corresponde a los alimentos reales y de verdad.
En otras palabras, los alimentos procesados y ultraprocesados no son los más convenientes en ese sentido. Un consumo frecuente de los mismos trae diversos problemas a nuestra salud.
Con respecto al desayuno, esta primera comida contiene suficiente aporte energético para la activación del metabolismo, impulsando el funcionamiento correcto del organismo.
Una vez que es omitido el desayuno, se agotan paulatinamente las reservas de energía. Por ello, de pronto aparecen sensaciones extremas de debilidad y fatiga.
En la misma línea, diferentes investigaciones revelaron que el no desayunar impulsa el aumento de peso, porque el hambre del organismo es voraz y come cualquier cosa precipitadamente.
Notas finales
Generalmente, la ansiedad por comer luego de saltarse el desayuno, causa que la persona acuda a alimentos ricos en azúcares y carbohidratos. Los mismos no le traen ningún beneficio.
Cuando el organismo disminuye las calorías diarias necesarias, cae en una tendencia de “ahorro” energético, que a futuro lo llevará a padecer sobrepeso.
Como se mencionó previamente, ayunar causa la bajada de los niveles de azúcar en la sangre: las personas que ayunan pierden la capacidad de prestar atención y bajan su rendimiento.